Un estudio realizado por la clínica neurológica COVID-19 del Northwestern Memorial Hospital de Estados Unidos evaluó a las personas infectadas por el coronavirus al principio de la pandemia y descubrió que más de la mitad de ellas sufrían fuertes dolores de cabeza, entumecimiento, fatiga u hormigueo.
La infección por Covid-19 no tratada puede dañar el cerebro
En la investigación participaron personas que nunca habían sido hospitalizadas pero cuyos síntomas duraban más de seis semanas. El Dr. Igor Koralnik, jefe de enfermedades neuroinfecciosas del hospital, dijo que los síntomas son similares a los de las personas que sufren una lesión cerebral, una conmoción cerebral o el síndrome de fatiga crónica, y los describió como una intensa niebla mental.
Otros pacientes compartieron síntomas como temblores, hormigueo en las extremidades, visión borrosa, percepción de olores extraños, dolor muscular, mareos y pitidos en los oídos.
Por otra parte, este estudio reveló que no todas las personas con estos síntomas neurológicos a largo plazo fueron diagnosticadas con COVID-19, porque en ese momento las pruebas no estaban disponibles o no eran totalmente precisas. Por ello, algunos de los enfermos suelen ser considerados hipocondríacos o ansiosos y no se les tiene en cuenta.
Secuelas que pueden durar mucho tiempo
El estudio confirmó que los síntomas de las personas fluctuaban o persistían durante meses. La mayoría de la gente mejora, pero hay que tener en cuenta una amplia variación", dice el Dr. Koralnick, poniendo ejemplos. Algunas personas se recuperan casi por completo al cabo de dos meses, mientras que otras sólo consiguen un pequeño porcentaje de mejora al cabo de nueve meses.
Asimismo, los expertos creen que la razón de estos síntomas es una reacción inflamatoria causada por el virus, que, además del cerebro, puede afectar a otras partes del cuerpo.